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Nadie Canta, una obra monumental de la artista cordobesa Indira Montoya a las puertas del Riachuelo Por Natalia Albanese Gisbert

Nadie Canta, una obra monumental de la artista cordobesa Indira Montoya a las puertas del Riachuelo Por Natalia Albanese Gisbert

El pasado sábado 16 de marzo la Fundación Andreani, en su edificio ubicado al frente del Riachuelo, en el clásico barrio de La Boca, inauguró una destacada apuesta artística de Indira Montoya. Se trató de la exhibición Nadie Canta promovida por la institución que surge luego de que la artista ganara el Primer Premio Andreani Arte, tecnología y ciencia (2023), que recibió en noviembre del año pasado, y contempló la suma de $1.000.000 en reconocimiento a su labor. Vale aclarar que esta mención fue elegida entre 24 obras que fueron exhibidas en las salas de la Fundación, de un total de 1200 postulaciones de artistas que participaron de una convocatoria abierta y federal. El jurado, integrado por referentes del campo del arte con trayectoria internacional, se conformó por Carla Barbero, Laura Buccellato, Mariano Giraud, Andrés Denegri y Carlos Huffmann, quienes realizaron la selección de las obras que integraron una exposición, de la que luego finalmente se eligieron los premiados. 

Por otro lado, en paralelo con esta inauguración, dos artistas más, estrenaron obras, se trató de la propuesta Temporal, de Augusto Zanela y Huancas, de Rodrigo Alcon Quintanilha.

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La Previa

En palabras de la artista: el proceso de producción fue un arduo trabajo que pude llevar adelante con el apoyo de todo el equipo de la Fundación. El diseño de montaje que propuso Laura Buccellato le permitió a las piezas calzar en las salas. Veo la muestra y observo que las obras cobran otra escala. Anteriormente, en otras oportunidades por cuestiones presupuestarias no se han podido lograr eso, una dimensión donde la obra calze. Esta magnitud propone un despliegue de los personajes, de la narración (casi cinematográfica) y los estímulos sensoriales que le otorgan mayor expansión. Por otro lado, esta disposición espacial nos permite un doble juego, el carácter monumental de la exposición convive con una dimensión más introspectiva, las paredes son oscuras, hay una intención de austeridad en el recorrido, como así también en la visualidad de las tres obras que la componen.

En la sección Principal, por sexta vez The White Lodge estuvo presente con la exposición Naturaleza del futuro que incluyó obras de 7 artistas representados: Manuel Coll, Rosa Mercedes González, Beatriz Moreiro, Jacinto Muñoz, Gerardo Oberto y Sheila O`connor y Claudia Santanera.
Según Georgina Valdez, directora de la galería, los días sábado y domingo fueron las jornadas en las cuales se concretaron muy buenas ventas.

Las salas

Nadie Canta construye un entorno híbrido entre imaginarios virtuales y concretos que se despliega en cinco piezas: dos de ellas en formato audiovisual, la tercera es una escultura (realizada con impresión 3D en resina y plástico), la cuarta. una pieza para Oculus, es una obra de realidad virtual totalmente inmersiva en la que el elemento principal es la danza (una danza del fin del mundo) en la cual el espectador se introduce en el movimiento y los paisajes y por último, una pieza 360 que es una pieza inmersiva que recorre los escenarios a vuelo de pájaro. Para esto se colocaron en sala teléfonos celulares y visores de cartón junto con un Oculus Quest que están a disposición del público.

En la exhibición puede contemplarse una obra principal en una pantalla de diez metros de largo, allí flotan fragmentos del bioma del espinal cordobés, en franco proceso de extinción. Indira intenta provocar un gesto de conservación que fusiona aspectos recuperados directamente del paisaje y otros producidos a partir de procesos de modelados a partir de la cartografía geográfica  de Córdoba. La experiencia del público se encuentra atravesada por estímulos visuales y sonoros, con la gramática propia de la artista, que lleva embeberse de un universo que roza lo ruinoso, lo onírico con lo sublime y cotidiano.

A su vez, en las salas se encuentra presente la escultura El ángel vacío, uno de los  personajes que aparecen en el video y cobra dimensión física. Sin muchas más pretenciones, esta pieza escultórica de color áureo metalizado conecta ambos audiovisuales y organiza la trayectoria de la experiencia visual.  

Por último, a modo de cierre, se proyecta un video que opera como una suerte de epílogo esperanzador ante el mundo corrosivo de las cenizas. 

En este sentido, la artista nos propone una pregunta sobre cómo habitar ciudades que colindan con bosques devastados, que va desde cruce evolutivo máquina-naturaleza y aparece como una realidad lúcida que nos permite construir una liturgia íntima en este mundo evanescente.

Sobre la artista

Indira Montoya nació en Córdoba en 1975. Ella se define como artista visual y performer. Es licenciada en Comunicación Audiovisual. Se formó en las clínicas y talleres de artistas cordobeses como Aníbal Buede, Soledad Sánchez Goldar, Gabriela Halac y Lucas di Pascuale.

Lleva más de quince años investigando poéticas que están atravesadas por los gestos del cuerpo, el lenguaje digital y las visualidades de las materias. Su proceso de investigación se basa en un método autodidacta que explora al límite el aprendizaje a través de la prueba y el error. Es a partir de este incansable formular que ella moldea sus piezas en cualquier soporte, ya sea analógico o digital. Sus obras han circulado por espacios públicos e independientes de la ciudad. Su última propuesta, una muestra individual titulada El monte impronunciable formó parte de la programación del Museo de las Mujeres y funcionó como práctica premonitoria para la puesta en escena de Nadie Canta.

Si observamos con el paso del tiempo su obrar, no solo vemos el camino orgánico entre las preguntas que activan su producción, los lenguajes que utiliza sino una gramática propia y única. Una voz autoral que rasguña los efímero del paso del tiempo.

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Pasó la Semana del arte y Córdoba dijo presente

Pasó la Semana del arte y Córdoba dijo presente.

La Semana del arte de la ciudad de Buenos Aires es un evento organizado por una veintena de instituciones públicas y privadas vinculadas al arte, entre ellas el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Fundación Arteba, Museo Nacional de Bellas Artes, Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), entre otras.
Durante 7 días Buenos Aires propuso una agenda de más de 100 actividades con exposiciones de artes visuales esparcidas por toda la ciudad.


La capital del país vivió su encuentro anual en el que orbitan una serie de acciones que promueven el mercado del arte contemporáneo argentino.
El epicentro del evento es la feria Arteba y para esa oportunidad se sumó Affair, una nueva iniciativa con 11 galerías participantes.

32º edición de Arteba

Todas las fotos son gentileza Fundación arteba.


El pasado miércoles 30 de agosto la feria Arteba 2023 abrió sus puertas al público especializado hasta el domingo 3 de septiembre en el complejo ferial Centro Costa Salguero.
Este año participaron más de 400 artistas, representados por 58 galerías de más de 15 ciudades. La propuesta cordobesa pudo verse en cuatro stands.
En la sección Principal, por sexta vez The White Lodge estuvo presente con la exposición Naturaleza del futuro que incluyó obras de 7 artistas representados: Manuel Coll, Rosa Mercedes González, Beatriz Moreiro, Jacinto Muñoz, Gerardo Oberto y Sheila O`connor y Claudia Santanera.
Según Georgina Valdez, directora de la galería, los días sábado y domingo fueron las jornadas en las cuales se concretaron muy buenas ventas.

Por otro lado, la mítica galería Vía Marutta, con más de 32 años de trayectoria, contó con la presencia de artistas consagrados como Carlos Alonso, Ides Kihlen y Roberto Matta. En diálogo con María Becerra, nos comentó que la propuesta expositiva tuvo una cálida recepción por parte del público asistente y el gran reconocimiento al maestro Alonso.

Ides Kihlen por Galeria Via Marutta. Gentileza de Fundacion arteba

Así mismo, la galería Maman Fine Art con sede en Buenos Aires y Miami expuso un sentido homenaje a Luis Wells, maestro del informalismo argentino que pasó los últimos años de su carrera en Córdoba y la presencia de Dolores Cáceres, artista cordobesa con su serie Todo lo que brilla es oro.

A la izquierda: Homenaje a Luis Wells.
A la derecha: parte del Stand de galeria Maman Fine Art.
Gentileza de Benjamin Vizcaino.

En la sección Joven (llamada Utopía) se destacó la muestra Portal de tiempos de Satélite, una propuesta que englobó trabajos de 5 artistas contemporáneos que trabajan en Córdoba, Gisella Mailén Scotta, Gabriel Alarcón, Marisol San Jorge, Pablo Martínez y Valeria López, con el acompañamiento curatorial de Manuel Molina. El balance de Valeria López – directora del proyecto- es positivo tuvimos la alegría de ser seleccionados por el jurado para contar con el apoyo de una beca MICA del Ministerio de Cultura de la Nación y eso nos ayudó muchísimo para llevar adelante esta participación.

Satelite en Arte ba. Gentileza de Fundacion arteba.

Un animal demasiado solitario se come a si mismo

Cuerpos de Pablo Martinez

Dentro del Programa de Arte e Impacto Social YPF, estuvo presente Mantera Galería junto a Distrito 1, Fundación Qomlashepi, Mujeres indígenas, Silät, Tejedoras Wichí, Tejedores Andinos y Tribu del Trueno, curado por Andrei Fernández. Ésta fue una sección dedicada a propuestas en donde la producción artística va de la mano de la voluntad de transformar su contexto y comunidad.

«El sentido migrante» de comunidades presentes. Gentileza de fundacion arteba.

Las primeras compras en la feria se realizaron en el marco del Programa de Adquisición de Museos por parte de los principales museos e instituciones nacionales e internacionales.
El programa es financiado por mecenas particulares, la participación de los museos internacionales y cuenta con el apoyo de la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional. A nivel nacional, las provincias de Santa Fe, San Juan, Salta y Corrientes llevaron adelante adquisiciones. Sin embargo, el gobierno de la Provincia de Córdoba este año no lo hizo.

Fundación Azcuy: Sin título, de Juan Tessi – Galería Nora Fisch. Gentileza Fundacion arteba.

Ludwig Museum: 9 obras sin título sobre cartón de Ary Brizzi – MC galería. Gentileza Fundacion arteba.

Fundación Aldo Rubino: Serie cuerpo fofo, de Cristina Schiavi – Galería W. Gentileza Fundacion arteba.

Affair

Con respecto a Affair, una plataforma de promoción y comercialización de arte contemporáneo gestionada por 11 galerías de arte, ubicada en Polo Cultural Saldías.
Contó con la participación de 4 galerías cordobesas: Sasha D Espacio de Arte, LyV Gallery, Tierra y María Wonda. Vanesa Amenebar, Luciano Coldman, Mariana Allievi fueron los artistas presentados por la galería Sasha D; esculturas de Luis Wells y Ike Tashiro en LyV Gallery.

Feria Affair. Fotografías de Pablo Jantus©ARSOmnibus

Por otro lado, los artistas Javier Calcaterra, Alejandro Niz, Federico Kirschbaum, en trastienda Karina El Azem, Santiago Moreyra en Tierra y Dolores Cabanillas, Rodolfo Zagert y Lucrecia Bertonoli con María Wonda.
Por su parte, Belén Wonda destaca un saldo más que positivo de esta primera edición de AFFAIR tanto en la respuesta del público en asistencia y compras como hacia el interior de la organización con el equipo de trabajo y el grupo humano conformado.
Por otro lado, en el stand de la galería Acéfala pudieron verse obras de la artista Samanta Ferro.

Tendencias del mercado

A pesar de que actualmente nos encontramos atravesando la crisis cambiaria propia de las turbulencias políticas, durante estas jornadas del mercado del arte pudo palpitarse un clima festivo, acompañado por caudalosas ventas a coleccionistas, adquisiciones de museos públicos y la celebración de los 15 años del Premio en Obra, incentivo a proyectos y artistas jóvenes promovidos por los coleccionistas Joaquín Rodríguez y Abel Guaglianone.


En términos generales, se visualizó una predominancia por las estéticas modernistas pictóricas con preponderancia por el cuidado de las formas y la preocupación por el tratamiento del color.

Para leer la nota en La Voz, clickea acá.

Escribió Natalia Albanese.

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Así fue la 5ta edición de la Feria ArteCo

Así fue la 5ta edición de la Feria ArteCo.

Una feria con identidad propia.

Inicio con una discusión de Fernand Braudel (historiador francés, de la segunda generación de la Escuela de los Annales, academia dedicada a integrar el estudio de Historia y Ciencias Sociales). Él introduce un nuevo concepto de tiempo histórico. Habla de una pluralidad de tiempos que coexisten. Braudel propone tres tiempos diferentes, cada uno con su propia velocidad:

1) Tiempo largo (longue durée) o ‘tiempo geográfico’.

2 )Tiempo “medio” (conjunctures) o ‘tiempo social’.

3) Tiempo corto (événementiel) o ‘tiempo individual’.

En el tiempo largo (o nivel de las estructuras cuya estabilidad es muy grande), diremos que estamos navegando a escala global en los tiempos de las ferias y bienales. Desde el punta pie inicial que da en 1970 con Art Basel en Basilea hasta nuestros días.

Podemos ver como lentamente en distintas capitales del mundo el bichito de la feria empieza a crecer.

Tanto es así que en este último febrero se celebró en Madrid la 42ª edición de ARCOMADRID y nuestra hermana mayor ARTEBA cumple en septiembre 32 años de aquella primera edición en el Centro Cultural Recoleta.

También Braudel hablaba de un tiempo social; conjunctures, la coyuntura (estadio intermedio, en que el cambio es perceptible)

«En nuestro caso, será celebrar los 5 años de ARTECO: una feria con identidad propia, con payé, con vínculos arraigados en instituciones y en la comunidad artística local y paraguaya. Que se piensa con y desde el cauce del río Paraná y de manera expansiva.»

Por último, événementiel, el acontecimiento (considerado como la espuma de la historia) o tiempo individual, en el cual el historiador nos interpela con las vivencias personales que nos atraviesan en ese acontecimiento. En este tiempo vital, donde tuvimos la oportunidad única del 18 al 21 de mayo, todos los agentes que integramos el campo del arte argentino disfrutamos de la diversidad cultural de la región.

Una feria es ante todo un proyecto integrador, que busca sumar, abrir el campo del arte e incorporar al sector privado. Junto con acciones que fomentan la producción, contribuye a linkear la escena, generar más trabajo, circulación de obras y formación de colecciones – reflexiona también en viaje–.

Hay riesgos. Una feria es insuficiente ante un panorama legislativo y económico nacional que erosiona las condiciones de producción. No resuelve temas estructurales sino que activa y organiza una parte de la circulación y recepción del arte. Esta proliferación de ferias requiere programas de fomento al coleccionismo, urgente.

Cuando se activa el deseo, se activa la compra y ahí ocurre la magia. Necesitamos generar estrategias de mercado sostenibles que nos permitan la distinción de valores según la carrera de cada artista.

Durante los cuatro dias de la Feria pasaron mas de 40 mil personas por el predio de la Ex Usina Electrica de Corrientes. Se vendieron 364 obras.

Circuito de arte en Corrientes.

En el Museo Casa del Parque ubicado en el Barrio Cambacua de la ciudad de Corrientes se inauguró parte de la muestra Laberintos de la Fundación Proa. Esta muestra si bien fue inaugurada en el marco de ArteCo 2023 estará expuesta en la ciudad hasta finales del mes de julio. En la misma se pueden encontrar obras de los artistas Alejandro Chaskielberg, Giovanni Battista Piranesi, Antonella Bussanich, Ilaria Di Carlo, Jorge Miño, Karina El Azem, Ernesto Pesce, Mariana Schapiro, entre otros.

En esta edición hubo un circuito del arte con actividades en cinco puntos de la ciudad. La Ex Usina Eléctrica como punto central, el Museo Provincial de Bellas Artes, el Centro Cultural Universitario de UNNE, el Museo Casa del Parque y la Legislatura de la Provincia de Corrientes. “Buscamos que toda la ciudad pueda respirar de alguna manera el aire de las producciones artistas”, destacó el arquitecto Gabriel Romero.

En la Fundación Proa esta muestra fue curada por Cecilia Jaime y Mayra Zolezzi. Julio Sánchez, licenciado en Historia del Arte (UBA) y Máster en Gestión Cultural (INAP) fue el curador y responsable de que esta muestra llegue a la provincia de Corrientes. Por su parte Mayra Zolezzi explicó que el laberinto es un tema que atraviesa la historia de la humanidad, distintas civilizaciones y culturas, “son esos temas como la vida, la muerte, el amor, que se ha representado de múltiples maneras desde distintas disciplinas, desde el cine, la literatura, desde las artes visuales, la fotografía, también desde la arquitectura y el espacio urbano, también como metáfora de la vida misma”.

Libro y muestra sobre Yaguá Rincón.

El Gobierno de Corrientes, a través del Instituto de Cultura de la Provincia, encomendó la publicación de un libro y la realización de dos muestras con el objetivo de rescatar la memoria del primer colectivo de arte contemporáneo de la provincia: Yaguá Rincón: la residencia que abrió el artista Richar de Itatí en 2007 en su cuarto de pensión frente al puerto de Corrientes. «Pensaban y definían un momento de la historia del arte de Corrientes. Lo más valioso: sin dimensionar ni saber lo que estaban gestando en torno al arte contemporáneo», definió Gabriel Romero, presidente del Instituto de Cultura.

El libro Yaguá Rincón fue editado por el sello India Ediciones, dirigido por Eugenia Rodeyro y Victoria Blanco, con edición al cuidado de la periodista especializada en arte María Paula Zacharías. El mismo tiene casi trescientas páginas, con más de doscientas imágenes y textos de quince autores. Además cuenta con un apartado con recortes de prensa que hace al archivo documental de una época. Además de su edición impresa el libro tendrá una edición digital de descarga gratuita en el sitio del Instituto de Cultura de Corrientes.

La muestra sobre Yaguá Rincón realizada en el marco de ArteCo 2023 fue curada por el artista y curador Gustavo Piñero. Se realizaron dos exposiciones tanto en la ex Usina Eléctrica como en un espacio especial del hotel La Alondra. Piñero, describió: “Yaguá Rincón no solo fue un grupo de artistas que trabajaron juntos, sino también un experimento social. Cuando no se coincide con las reglas de la sociedad en la que uno habita, quizás se puede crear una nueva, una pequeña comunidad aglutinada bajo intereses comunes. Un espacio de libertad en donde con iguales se dejan transcurrir las horas en debates o se trabaja en diversas obras, que en muchos casos devienen colectivas”.

Premiso In Situ y UNNE.

En la 5ª Edición de ArteCo 2023 se otorgó dos importantes premios. El premio In Situ de la mano de los coleccionistas Abel Guaglionone y Joaquin Rodríguez. El primer premio le otorgaron al proyecto cultural artístico – ¿qué ves Yapeyú?, una residencia para artistas en la ciudad de Yapeyú coordinado por Francisco González Baltazar y Lorenzo González Baltazar. El segundo premio In Situ fue para “Relatos visuales”, de las artistas Guliana Uset, Maflo Martínez, Valeria Thomas Temporelli y Victoria Benítez.

En tanto desde la Universidad Nacional del Nordeste, María Andrea Maia Eirin, directora del Centro Cultural Universitario junto al jurado entregaron dos premios, Premios Adquisición y Premio Exposición. El jurado del premio UNNE Adquisición estuvo conformado por Sandra Dinnendahl López, Andrea Núñez y Claudio Javier Vallejos quienes premiaron la obra de la artista Fabiana Larrea por su obra “La Fibra vegetal 2”.

En tanto el Premio UNNE (Exposición) que otorgará la posibilidad de exponer en las salas de los dos Centros Culturales de la UNNE, CCU y CCN, en el 2024, cuyo jurado estuvo integrado por Marisa Eugenia Rossini, Débora Durán y María Esperanza Gómez Castillo le otorgaron el premio al artista Cristian Badaró.

Agradecimientos.

Dedico un agradecimiento especial al Arquitecto Gabriel Romero por convocarme y a Joaquín Rodriguez y Abel Guaglianone, impulsores del Premio In Situ. Agradecer a la Curaduría general del artista y curador Gustavo Piñero. El espacio editorial fue curado por Lucas Mercado, el Festival de Arte Sonoro por Julia Rossetti y Martín Sandoval, el programa de Becas Artistas Visuales de Corrientes por Fernanda Toccalino y el espacio de video y Festival Play – videoarte y cine experimental por Maia Navas. También en el marco de esta feria se inauguró la muestra Laberintos de la Fundación Proa curada por Julio Sánchez.

La coordinación general del proyecto de ArteCo estuvo en manos de Natalia Albanese. La producción general fue de Andrea Núñez, la directora de infraestructura y obras en la Ex Usina Marta Vizcaino,  coordinadora de artistas individuales y redes sociales Vanina Daubrowsky, coordinadora de galerías María Esperanza Gómez Castillo, coordinadora del sector editorial y auditorio Jazmín Rea, encargada del área administrativa Nazareth Fernandez Hermosi. En redes Matías Zelarayan y diseñador gráfico Antonio Ras Fernández. En el programa de invitados especiales Melanie Servin y en administración Lucía Alvira.

Natalia Albanese

Coordinadora General de ArteCo 2023

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La Feria Arteco lanzó su quinta edición en el MalBa

La Feria Arteco lanzó su quinta edición en el MalBa.

El Gobierno de la Provincia de Corrientes, a través del Instituto de Cultura de Corrientes, realizó el lanzamiento de ArteCo en Buenos Aires junto a la Fundación Proa. Fue el martes 25 de abril en el Museo de Arte Latinoamericano.

De izquierda a derecha: Natalia Albanese, Larisa Andreani, Gustavo Piñero, Abel Guaglianone, Gabriel Romero, Eleonora Jaureguiberry y Joaquín Rodríguez. 

La continuidad de una política pública y un espíritu federal que busca acercar las provincias a ArteCo 2023 llevó su presentación a Buenos Aires. El año pasado fue en el Museo de Arte Moderno Eduardo Sívori. Este año la cita fue en el MalBa. «Estamos contentos de hacerlo en un lugar tan prestigioso para el arte. Es importante para nosotros mostrar el arte que se produce en las provincias de Argentina”, destacó el arquitecto Gabriel Romero, presidente del Instituto de Cultura.

“ArteCo se posiciona como la vidriera para los artistas de Corrientes y la región. Con la realización de la Feria en Buenos Aires se busca atraer a compradores, coleccionistas y prensa especializada. Es también la oportunidad de visibilizar el arte de Corrientes y de la región”, agregó.

Asistieron funcionarios, artistas y coleccionistas que nos permiten potenciar el arte contemporáneo de nuestro país.

Te invito a leer la nota que escribió La Nación haciendo clic aquí.

Entrevista durante el lanzamiento en el Malba.

La programación ampliada de la feria cuenta con la curaduría general Gustavo Piñero quien practica la escucha y la percepción para interpretar también una cultura donde el legado intangible está presente. En tanto el espacio editorial es curado por Lucas Mercado, el Festival de Arte Sonoro por Julia Rossetti, el programa de Becas Artistas Visuales de Corrientes por Fernanda Toccalino y el espacio de video y Festival Play – videoarte y cine experimental por Maia Navas. También en el marco de esta feria se podrá apreciar parte del a muestra Laberintos de Proa de la mano del curador Julio Sánchez.

La programación ampliada de la feria cuenta con la curaduría general Gustavo Piñero quien practica la escucha y la percepción para interpretar también una cultura donde el legado intangible está presente. En tanto el espacio editorial es curado por Lucas Mercado, el Festival de Arte Sonoro por Julia Rossetti, el programa de Becas Artistas Visuales de Corrientes por Fernanda Toccalino y el espacio de video y Festival Play – videoarte y cine experimental por Maia Navas. También en el marco de esta feria se podrá apreciar parte del a muestra Laberintos de Proa de la mano del curador Julio Sánchez.

 

El objetivo de esta edición es fomentar el crecimiento del sector en la circulación y la comercialización de las obras de arte de la región, de hecho esta edición cuenta con más de cinco proyectos nuevos locales. Propiciamos el encuentro y la participación mutua y colectiva de los artistas con las galerías y de los artistas asociados entre sí.

Artistas, escritores, galeristas se encuentran con un público variado. Articula artistas plásticos con el mercado, algo que de a poco empieza a consolidarse en nuestro país, impulsado por el Estado. 

Arte Co es una feria que continuamente hackea lo normativo, porque tiene una identidad muy propia, con payé, con vínculos enraizados en instituciones y en la comunidad artística local y paraguaya. Los artistas correntinos dialogan con el paisaje, tienen mucho vínculo con las poéticas de la cercanía natural, sobre todo con el cauce del río Paraná. La geografía tiene mucha potencia. Para ArteCo el territorio es cualquier lugar a ser experimentado.

 

“En Corrientes se pueden encontrar con la exuberancia del paisaje, con la riqueza del patrimonio arquitectónico y con el patrimonio intangible de la humanidad como el chamamé. Creemos que todo eso está atravesado en las obras de los artistas. Una de esas experiencias que dan cuenta de esto es «Yaguá Rincón» donde articularon lo contemporáneo con la religiosidad popular, el paisaje y el ser correntino.»

Esta 5ta edición de ArteCo 2023 tendrá un circuito importante de exposiciones que van desde la Ex Usina Eléctrica como punto central, el Museo Provincial de Bellas Artes, el Centro Cultural Universitario, el futuro Museo del Carnaval y la Legislatura de la Provincia. Será en la Ciudad de Corrientes del 18 al 21 de mayo.

Les recomiendo tener oportunidad de ir a la feria, porque es accesible para todo público y ayuda a visualizar la producción de un modo más fácil que lo que puede ser en un museo. Se presentarán multiplicidad de propuestas, con la posibilidad de comprar obras.

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Un nuevo código de ética para coleccionistas y algunas discusiones que convoca

Un nuevo código de ética para coleccionistas y algunas discusiones que convoca

El 2 de mayo de 2022 se presentó en la Colección de Arte Amalia Lacroze de Fortabat Un código ético para coleccionistas. Organizado por la revista de arte Terremoto en colaboración con Ethics of Collecting, puede leerse online su versión en inglés.

Se propone como set de herramientas que busca inspirar y guiar a quienes se definen como coleccionistas de arte contemporáneo y deciden voluntariamente adherir a él. Benedicta M. Badia Nordenstahl, coleccionista argentina y una de las promotoras de la iniciativa, sostuvo que el código fue escrito por un grupo de coleccionistas que:

“Entiende su práctica como una responsabilidad social y ven el coleccionismo más allá de la compra-venta del arte. El puntapié inicial fue clasificar el arte como un sector de interés público. Se investigaron normas de conducta de otros sectores de interés público, como salud, educación, transporte, entre otros”

Este cambio de enfoque nos invita a reflexionar desde un nuevo paradigma porque la transacción deja de ser vista como un intercambio entre privados y pasa a ser comprendida en el marco de condiciones de producción y recepción del campo del arte.

«Amo tu trabajo -me recuerda a muchos artistas que estoy coleccionando y que están recibiendo más atención que tú.» de Pablo Helguera

Por su parte, Leopol Mones Cazón, galerista y miembro de MERIDIANO (Cámara Argentina de Galerías de Arte Contemporáneo), señala que la cámara acompaña este tipo de iniciativas que alientan a profesionalizar e institucionalizar las prácticas del sector. En este sentido, el expresidente de MERIDIANO precisa que: “la generación de un código de ética interno para las galerías que comenzó desde los inicios de la cámara en el año 2014 nos permitió ir construyendo acuerdos entre pares. Nosotros lo dimos a llamar ‘Código de buenas prácticas profesionales’. Sin entrar en la discusión etimológica sobre los conceptos de buenas prácticas y ética, que excede los límites de este artículo, resulta interesante la diferencia de nominación:

Las galerías ponen el foco en buenas prácticas profesionales y los coleccionistas piensan en términos de ética. En el caso de las primeras, esta distinción se puede atribuir a la intención de profesionalización de los procesos de gestión, y en el caso de los segundos, a enfatizar la adhesión voluntaria a este corpus de normas.

«El coleccionista sabe que supuestamente no debe decir qué tipo de arte el artista debe hacer -casualmente dejo su lista de deseos del tema, color, tamaño y composición sobre la mesa.» de Pablo Helguera

El Código se presenta como una propuesta que busca fomentar un coleccionismo que deje de ser una actividad secreta y busca que se respete la autonomía de todos los profesionales del mundo del arte. Cuenta con la intención de promover el trabajo colaborativo para garantizar el bienestar y los derechos laborales de todas las partes.

 

Se estructura en siete apartados:

  1. – Relación con artistas.
  2. – Gestión de la colección.
  3. – Obras por encargo y apoyo a la producción artística.
  4. – Apoyo a instituciones.
  5. – Prestación de servicios como miembros de cuerpos gubernamentales,.
  6. – Relación con dealers y/o galeristas.
  7. – Relación con otros profesionales.

El Código es un manifiesto de comportamiento ético que entiende al coleccionista como un actor del ecosistema del arte. Inserto en este engranaje de relacionamiento y detentando el poder de compra y/o financiamiento, hasta hoy no ha sido nunca cuestionado ni regulado en su práctica. Se presenta como una invitación a incentivar relaciones entre los coleccionistas y todos los agentes que interactúan en el campo del arte (artistas, curadores, historiadores del arte, docentes, galeristas, referentes de instituciones) de una manera respetuosa, transparente, sin tratos abusivos.

El texto fue impulsado por un grupo de coleccionistas residentes en Europa, América del Sur y del Norte, quienes durante más de un año discutieron y reflexionaron al respecto. Se ha nutrido, además, del aporte de varios profesionales del sector. La redacción estuvo a cargo de Pedro Barbosa, Haro Cumbusyan, Iordanis Kerenidis, Evrim Oralkan, Jessica Oralkan, Piergiorgio Pepe, Sandra Terdjman y Andre Zivanari.

Según puede leerse en la iniciativa, el mundo del arte ha atravesado una transformación significativa en la que se plantea el debate de un número cada vez más amplio de cuestiones éticas en torno al papel del arte y de los trabajadores del arte. En particular, existe una conciencia mayor de que el sector del arte históricamente ha operado con un nivel de desconexión de algunos de los conceptos básicos de la ética profesional. En consecuencia, la opacidad y el poder/dependencia suelen ser la norma, aunque la transparencia, la rendición de cuentas, la integridad y la equidad son necesarias en cualquier mercado a gran escala.

El antropólogo Arjun Appadurai afirma que el consumo es eminentemente social, correlativo y activo, en lugar de privado, atomizado y pasivo; por lo tanto, suena razonable echar luz sobre la práctica del coleccionismo.

Tras el gesto de este grupo de coleccionistas que desde el sector privado entienden el carácter público de sus actos, vuelve a quedar en evidencia la ausencia del accionar del Estado y la desregulación del mercado en la escena local del arte contemporáneo.

La falta de normativas que regulen la práctica artística y resguarden los derechos laborales de los profesionales que integran el sector o la ausencia de leyes que promuevan la comercialización de obras de arte por parte del sector privado y público provoca condiciones dispares en el mercado.

En este sentido, la socióloga Mariana Cerviño apunta que el bajo volumen total de inversiones privadas y la casi inexistencia de adquisiciones de instituciones públicas de obras de arte producidas en nuestros días hacen necesario repensar la competencia del Estado en estos asuntos, cuyo —magro— presupuesto para el fomento del arte parece limitarse a las instancias de formación académicas, abandonando al mundo privado aquellas otras donde se construye el valor tanto simbólico como económico del arte.

El espíritu del texto no indaga sobre las contextos locales porque aspira a ser un código universal y a poner el foco en las prácticas de quienes coleccionan. Sin embargo, la recepción de este código nos da pie para pensar un análisis sobre el mercado de arte local y con él germina una serie de dificultades. Primero, partimos un poco a ciegas, siempre hacen falta datos o el acceso a ellos es laberíntico. No queda claro cómo se establecen los precios de las obras y qué tipo de cambio se toma al dolarizarlas.

Tampoco se conoce a ciencia cierta, cuando se realizan eventos de gran envergadura como ferias o galleries weekend, el impacto de estas acciones en términos económicos; me refiero específicamente a dimensionar el volumen de ventas total.

Vale decir que la pandemia abrevió la falta de transparencia, dado que crecieron las plataformas comerciales digitales. El más conocido es el caso Artsy, y quienes publicaron sus precios obtuvieron mejores resultados.

Esta opacidad a la hora de hablar de números suele provocar un descrédito en compradores ocasionales o quienes están analizando por primera vez inversiones en arte. Y también genera la monopolización del mercado en pocas manos: sólo aquellos que tienen los recursos (o capitales, en términos más sociológicos) para leer y operar las reglas del campo del arte son quienes pueden gestionar empresas sustentables, el resto queda afuera.

 

«Estoy seguro que donando una de tus obras a mi colección te sentirás muy honrado de estar junto a otros artistas famosos a quienes también engatusé para que me donaran sus obras.» de Pablo Helguera

En segundo lugar y volviendo al tema principal que es el coleccionismo de arte, vemos que la historia del arte argentino dedicó estudios fragmentarios, usualmente centrados en la figura de uno u otro protagonista o bien abocados a los procesos de conformación de las colecciones públicas de los museos.

Hay una vacancia en las reflexiones en torno a los consumos culturales de arte contemporáneo actuales. Este agujero negro en nuestra historia del arte contribuye a hacer aún más encriptadas las prácticas de compra-venta de arte.

El desconocimiento acerca de quién compra, cómo, cuándo, a cuánto, le pone el velo a la búsqueda de sistematicidad que esta práctica suele tener, porque como ya se ha dicho, el gusto es social.

«No sé que es lo que quiero. Me podés mostrar algo en esa categoría?» de Pablo Helguera

El tercer y último punto que resulta interesante rescatar es la manera en que los consumos culturales en las provincias vienen destacándose en —al menos— la última década. Provincias como Salta, Corrientes, Santa Fe, Córdoba y La Rioja cuentan con gestos tendientes a la comercialización de obras de arte. Algunas propiedades que emergen en estas latitudes son la proliferación de las ferias de arte a cargo del Estado; obras con precios más bajos en relación con el mercado porteño e intermitencia en los proyectos de gestión —dada la dificultad de la sostenibilidad económica—.

Si tomáramos a un artista emergente residente en alguna de las provincias mencionadas con una trayectoria similar a un artista que opera en Buenos Aires, encontraríamos grandes diferencias en las cotizaciones de sus piezas. La doble devaluación que experimenta la producción artística desde la Panamericana hacia el interior del país deviene no sólo de la inflación histórica argentina, sino de las condiciones estructurales actuales: pocos compradores que están dispuestos a pagar poco dinero e instituciones que no acompañan la producción contemporánea local.

«Si eres razonable me ofrecerás un 25% de descuento para que cuando venda la pieza mañana a más del 25% del precio de mercado tenga al menos un 50% de beneficio» de Pablo Helguera

Rescato la mirada de Pablo Montini a través de M.I.d.A. Mercado Inexistente del Arte (Rosario, Cultura Pasajera, 2005), donde se pregunta por la incidencia de las políticas de Estado necesarias para saldar la falta de un mercado del arte a partir de sus colecciones públicas, que permitan fluidez en los ingresos de los artistas.

Como cierre de estas ideas sueltas sobre el coleccionismo de arte, reverberan los modos de vincularnos con otros como eje central, volver al uno a uno para que desde esta base pensemos sistémicamente.

 

Escribió: Natalia Albanese Gisbert

ilustraciones de Pablo Helguera

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Maleza croma

Maleza Croma

Ungallery – Arroyo 932. Buenos Aires.

Es una exposición que se embebe de la clorofila de la vegetación del monte paranense atravesada por la escala cromática de luces y pigmentos para recrear nuevos mundos posibles. En este trabajo, Juan Jiant (Martín Coronado- Provincia de Buenos Aires, 1994) nos introduce a su universo onírico que se entremezcla con la contaminación urbana y la maleza para dar paso a una atmósfera llena de criaturas amorfas, aguijones volumétricos que se despliegan por el espacio de la salas. Éstos seres invitan al espectador a vivir las dualidades que se ponen en juego en cada pieza: realidad y ficción; naturaleza versus urbanidad; flow o obsesión; analogía & virtualidad. 

Al igual que cómo ocurre con los haikus (poemas japoneses formados por tres estrofas) en donde el poeta trata de expresar de forma sinética lo que acontece en un instante; las obras de Jiant nos hablan de las contradicciones de la vida cotidiana urbana a través de la creación de sus compostajes cromáticos.

La camelia en el suelo

ha vaciado de ayer

el aguacero 

Yosa Busón

A su vez, Maleza croma busca que nos detengamos a reflexionar de un modo lúdico sobre el impacto de la presencia humana en entornos naturales. En este sentido los haikus unen elementos aparentemente irrelevantes para situarnos en los movimientos de la naturaleza y sus símbolos. En ambos casos, hay una lectura poética del mundo natural y un gesto para resguardarlo.  

En esta propuesta expositiva, Juan explora -de modo casi obsesivo- los lenguajes y texturas pictóricas, escultóricas y digitales: salta de un render al trabajo manual en resina con tanta facilidad que las dimensiones analógico-digital son el linde y la materialidad de sus obras. Así, las piezas expuestas en esta oportunidad, permiten que Jiant experimente con las transformaciones morfológicas de organismos biológicos y el impacto que se genera en los ecosistemas tras el paso de la presencia humana. Las esculturas corporizan como juglares visuales su preocupación por cómo el ser humano padece, habita y se relaciona con la naturaleza y su modo destructivo de vincularse.

Natalia Albanese. Curadora. Marzo 2022.

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